Collar largo con centro de sodalita redonda, custodiada por lapislázuli, labradorita, selenita y cristales austriacos que reflejan la luz como estrellas. Cada segmento está unido con mostacillas japonesas de precisión, y el broche de acero quirúrgico asegura durabilidad y firmeza.
Una pieza que equilibra mente, cuerpo y energía.
La sodalita es la piedra de la lógica iluminada por la intuición. Fomenta el pensamiento claro, la autoexpresión y el equilibrio emocional.
El lapislázuli despierta la sabiduría interna y fortalece la conexión espiritual. Abre el tercer ojo y potencia la comunicación desde la verdad.
La labradorita es la piedra de la transformación y la magia. Protege el aura, eleva la consciencia y ayuda a navegar los cambios con confianza.
La selenita limpia, purifica y aporta claridad. Abre caminos energéticos y disuelve bloqueos.
Un talismán elegante para quienes confían en su camino interior.
Hecho a mano, único como tu energía.